La industria alimentaria es uno de los segmentos más amplios que requieren constantemente Gas Licuado del Petróleo (GLP) por su alto valor calorífico, ya que es una muy buena fuente de energía para procesar sus materias primas. También es un combustible que provee grandes ventajas en cuanto a inocuidad alimentaria, debido a que casi no posee contenido de azufre, lo que permite una combustión más limpia.

Dentro de este gran segmento, las panaderías son las más grandes consumidoras de GLP, debido a la gran demanda de sus hornos. Durante mucho tiempo, las panaderías en algunos países en vías de desarrollo, como el nuestro, usaron la madera como combustible para hornear pan. Este material no es ecológico, ni sostenible y además causa enfermedades a quienes lo usan. El GLP, en parte debido a la limpieza de sus productos de combustión, se puede usar para la preparación de productos de panadería sin riesgo de contaminación.

La principal ventaja del GLP sobre la panadería tradicional que usaba leña, es el medio ambiente limpio. Además de sus beneficios ambientales, el GLP brinda a los panaderos una serie de ventajas que incluyen ahorro en los costos energéticos, mejor calidad del pan, velocidad de calentamiento y buena conservación del calor. La potencia, limpieza, rapidez y flexibilidad del GLP se adapta a las técnicas de horneado más eficientes que se encuentran en la industria.

En Gas País encontrará un aliado estratégico para potenciar su negocio.